jueves, 25 de enero de 2007



EL DESIERTO

Ex. 8:28 / Ex. 10:24-26

El significado espiritual de desierto es…”desolado”, “soledad”.Siempre que aparece en la Biblia, eso significa.
Faraón representa a Satanás en esta historia y el pueblo de Israel nos representa a nosotros.
¿Quería Satanás que adorasen a Dios, si o no? Claro que si, “pero en el desierto y que no se fueran mas lejos.”

Satanás no tenia problemas que el pueblo adorase a Dios, pero bajo su dirección . El haría que el pueblo permaneciese en el desierto, y adorase a Dios todo lo que quisiera.
El le ofrecía libertad…¿Pero a que precio?
El precio era la pobreza, el despojo, la falta de recursos para adorar, porque no quería que llevaran los animales, con los que el pueblo de Israel ofrecería los sacrificios, es decir, sin medios para adorar. Desolado, solos, sin compañía y por sobre todo, lo mas triste… ¡¡¡Sin llegar a destino!!!

Esto me recuerda muchos en las iglesias hoy que aman a Dios pero Satanás le corto los recursos para ser feliz. Adoran a Dios bajo su dirección, ellos están bien, cuando Satanás quiere y están mal, cuando Satanás se lo propone. En una oportunidad le pregunte a una mujer, porque no había venido a la reunión dominical y su repuesta me dejo frió…¡¡¡Porque el diablo no me dejo!!!.Le dije, ¿eso quiere decir que usted se congrega cuando el diablo quiere?

Hay personas hermosas pero que están en el desierto, Satanás les quito los recursos para adorar, no tiene recursos para hacerlo. No tienen alegría, la felicidad, la paz, sus vidas esta controlada por las circunstancias y los problemas que viven a diario, como la gallina miran siempre hacia abajo y no pueden alzar sus ojos y contemplar su verdadero lugar.

Para salir de esa situación la respuesta la encontramos en Cantares 8:5.
El secreto es recostarse sobre el amado, cuando estamos en el desierto. No intentar salir por nuestras fuerzas, porque no estamos en condiciones de hacer nada.Dejar que el nos saque, descansar en el, depositar nuestra fe en el, hacer lo que el dice. Volver a creer y ser libres, pero libres de enserio, y no vivir con la libertad que Satanás nos ofrece.

¿En que libertad te encuentras? ¿Cuál es la libertad que vives? ¿Eres feliz cuando Satanás te lo permite?
¿Eres prospero cuando Satanás quiere?
Si es así…Sal de ese desierto y ve corriendo a tu Canaán, tierra donde fluye leche y miel.

Ptor OMAR OLIVA

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