miércoles, 10 de enero de 2007

LOS MUROS DE JERICO


LOS MUROS DE JERICO

Josué 6:1-21 / 1 P. 3-9

Siempre la historia de Josué frente a Jericó me ha cautivado. Josué era un conquistador.
Dios le entrego una ciudad indestructible, porque dos muros la rodeaban y no se podía penetrar dentro de ella. Sin embargo Dios le dijo a Josué…¡¡¡Tumbare esos muros y tu la poseerás!!! Josué creyó a Dios y después de estar en línea de batalla, Dios derribo esos muros en forma milagrosa y poderosa y Josué penetro a la ciudad y la conquisto. (Leer la historia)

Dios hizo esto por cinco cosas…

1) Para poner a prueba la fe del pueblo.
Les dijo que rodearan la ciudad siete veces que el derribaría los muros. Hay que ser loco o tener fe para creer eso.

2 ) Para poner a prueba su obediencia.

Siempre debemos recordar que la fe sin obra es muerta, y la obra de la fe es la obediencia.

3) Para poner a prueba su paciencia.

No derribaría los muros enseguida. Durante siete días debían rodear la ciudad todos los hombres de guerra y el séptimo día lo debían rodear siete veces y entonces Dios derribaría los muros. Era una lucha continua con la conciencia, la fe, la obediencia y la paciencia de cada uno.

4) Para ver si estaban dispuestos a obedecer un principio que a la humana razón parecía insensato. (Ex. 13:17-18)

Esta es la lucha continua entre la fe y la razón. Ambas cosas no son compatibles. Pero recuerda…”Sin fe es imposible agradar a Dios.”


5) Para ver si creían en una promesa que según sus cálculos humanos de probabilidades parecía imposible que pudiese llevarse a cabo.

Dios es un Dios de lo imposible. El siempre te sorprenderá aunque te cueste creerlo.

Después de leer esta historia, llegue a la conclusión que a los muros de Jericó los tumbo la fe. Ellos “CAYERON POR LA FE.”

“Por la fe cayeron los muros de Jericó, después de rodearlos siete días…” (Heb. 11:30)

La fe en Dios derriba muros, convierte lo imposible en posible y te hace un conquistador.

Ptor OMAR OLIVA




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